Una manilla antiestática, también conocida como pulsera antiestática, es un dispositivo que se utiliza para proteger los componentes electrónicos sensibles de los daños causados por la electricidad estática. Se coloca alrededor de la muñeca y se conecta a tierra, lo que permite descargar la electricidad estática del cuerpo del usuario. Esto es crucial en entornos como talleres de reparación electrónica, montaje de computadoras y cualquier lugar donde se manipulen componentes electrónicos delicados.